Expresando la Koinonia interna.
Texto: 1 Corintios 1:18-31.
Tema: Un análisis de la palabra koinonia (κοινωνία, 2842), tener en común (koinos),
compañerismo, comunión. Denota: (a) la parte que uno tiene en cualquier cosa,
participación, un compañerismo reconocido y gozado; así, se usa de las
experiencias e intereses comunes de los cristianos.
De
compartir en la vida de resurrección poseída en Cristo, y así de la comunión
con el Padre y el Hijo (1 Jn 1.3,6,7: «comunión»); negativamente, de la
imposibilidad de la comunión entre la luz y las tinieblas (2 Co 6.14:
«comunión»);
Proposición: Un
análisis de la palabra koinonia nos hará entender que la misma fue expresada a
través de nosotros desde antes de la fundación del mundo puesto que el hombre
como ser humano fue creado en koinonia plena entre Padre, Hijo y Espíritu Santo.
F.I: La Creación en koinonia.
P.E: Koinonía es la transliteración
de la palabra griega κοινωνία, que significa comunión; como concepto teológico
alude a la comunión eclesial y a los vínculos que ésta misma genera entre los
miembros de la Iglesia y Dios, revelado en Jesucristo y actuante en la historia
por medio del Espíritu Santo.
Según la RAE: Comunión de la Iglesia, o Comunión de los santos.
1. f. Rel. Participación que los fieles tienen y gozan de los bienes espirituales, mutuamente entre sí, como partes y miembros de un
mismo cuerpo.
Explicación: La
koinonia es expresión de la tricotomía de Dios a través de nosotros, puesto que
si fuimos creados y conformados en koinonia, así mismo debemos expresarla. Dios
por medio de la obra redentora de su hijo Jesucristo no solo vino a brindar
redención a la humanidad y recuperar el reino perdido. Dicha obra a su vez vino
a recobrar la koinonia perdida entre el primer Adán y Dios tras haber sido
quebrantada en el huerto del edén. Adán al inicio permanecía en total koinonia
con Dios, tenía canal directo en su actuar en su pensar. Lo que él pensaba lo
que el nombraba se encontraba en perfecta unión común con Dios. Al ser
expulsado por la desobediencia del mandato de Dios en el huerto del edén, este
vino a experimentar por vez primera la humanidad alejada de la comunión de Dios
y con ello todas las penurias que vienen contenidas por conducirse en una vida
sin total dirección de Dios. Nosotros como creyentes hijos de Dios y a su vez
como ministros competentes del nuevo pacto debemos internalizar, buscar
entender a plenitud que si no somos habitados por la gracia de Dios en todos
los ámbitos de nuestras vidas la manifestación de la koinonia difícilmente
podrá expresarse con el verdadero y poderoso efecto que Dios quiere manifestar
en nuestras vidas.
O.T: En estos momentos quiero
hablarles de que un Cristiano debe siempre permitir que la perfección en Cristo
sea manifestada a través de si en la forma de la verdadera koinonia que es El
mismo. Un cristiano debe ser un cristiano integral en todo ámbito de su vida.
Así como cuando a una persona se le realiza un análisis médico y es chequeado
en todos sus valores para obtener un resultado del análisis en muchos ámbitos
de su sistema orgánico e inmunológico y éste se le encuentra integralmente
estable. Así mismo el cristiano debe examinarse en toda área de su vida. En el
segundo caso la forma de solventar algún inconveniente con sus valores biológicos
es mediante una correcta medicación y sana dieta. En el primer caso la forma de
solventar algún inconveniente con sus valores espirituales y como cristiano es
mediante de la recepción y correcta expresión de vida de Cristo a través de
nosotros puesto que Él es nuestro sanador, suplidor y perfeccionador en todo.
La koinonia no es más que la expresión del pléroma
(llenura) de la vida de Cristo graficado (como un graphos) en nosotros que se
manifiesta en un efecto (Kratos) para que seamos sunergos
(colaboradores), en el oikos
(casa, hogar cuerpo, iglesia) de Dios.
Para conducirse en koinonia se debe entender que Cristo que es la koinonia
encarnada debe expresarse como vida en nosotros y a través de nosotros. Cuando
nos conducimos en dirección como creyentes de la palabra de Cristo, nos
conducimos como hijos en una perfecta relación con nuestro Padre. Como tal
comprendemos que tenemos un Padre bondadoso que con sabiduría y dirección nos
guía hacia adelante en todas las circunstancias y decisiones que tomemos o
hayamos de tomar, de tal manera podemos manifestar todos los atributos de
nuestro señor Jesucristo y todo lo que el Padre quiere que manifestemos en
total concordancia y en todo momento en nuestra vida de forma interpersonal a
padres, pastores, líderes, hijos, amistades, etc. Los cuales a su vez cuando
han comprendido también esta koinonia internalizada y expresada, han brindado
en su momento oportuno ayuda, consejo y cualquier otra enseñanza para graficar tanto
nuestras vidas como la de ellos en esa hermosa y perfecta koinonia manifestada
por medio de Cristo en cada parte del cuerpo En total sanidad integral
koinonica que es la iglesia.
I)
LA COMUNIÓN MANIFESTADA EN LOS
HECHOS, LOS EFECTOS PRÁCTICOS
DE LA COMUNIÓN CON DIOS, PRODUCIDOS POR EL ESPÍRITU SANTO EN LAS VIDAS DE LOS
CREYENTES COMO RESULTADO DE LA FE (FLM 6:
«PARTICIPACIÓN», RV: «COMUNICACIÓN»).
A.
(Filemón1:6) Para
que la participación de tu fe sea eficaz en el conocimiento de todo el bien que
está en vosotros por Cristo Jesús.
B. De
compartir en la conciencia de los efectos de la sangre, esto es, la muerte, de
Cristo y de su cuerpo, como ello es proclamado por los emblemas en la Cena del
Señor (1 Co 10.16: «comunión»);
C. 2
Co 9.13: «contribución», Cristo manifiesta esa koinonia a través de nosotros en
forma de gracia sobre gracia. 9:12 Porque
la ministración de este servicio no solamente suple lo que a los santos falta,
sino que también abunda en muchas acciones de gracias a Dios; 9:13 pues por la
experiencia de esta ministración glorifican a Dios por la obediencia que
profesáis al evangelio de Cristo, y por la liberalidad de vuestra contribución
para ellos y para todos; 9:14 asimismo en la oración de ellos por vosotros, a
quienes aman a causa de la superabundante gracia de Dios en vosotros. 9:15
¡Gracias a Dios por su don inefable! RV: «contribuir»; Heb 13.16: «ayuda
mutua», RV: «comunicación»);
II)
INTERNALIZANDO
LA OBRA DE CRISTO EN NOSOTROS PARA EXPRESION DE LA VIDA DE EL EN KOINONIA EN EL
CUERPO QUE ES LA IGLESIA. (VERSICULOS: 1 Jn 1.3,6,7).
A.
1:3
lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis
comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con
su Hijo Jesucristo.
B.
1:6
Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no
practicamos la verdad;
C. 1 Jn
1.3,6,7: «comunión» 1:7 pero si
andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la
sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
D. Debemos
ser conformados a la medida de Cristo, cada vez que tomamos una decisión o
acción en nuestras vidas y la consideremos que fuera una decisión de la cual no
estamos conformes (escúchese bien al decir decisión inconforme o no conforme,
mas no mala o buena decisión) lo hacemos por tener alguna inconformidad en
nosotros en alguna área de nuestra vida. Pero como tomar una decisión en total
conformidad si a esta le hace falta la conformidad misma que es el Cristo
conformador en todo. Actuar en conformidad es actuar en el conformador. ¿Cómo
puedes trasmitir decisiones conformes?, ¿Cómo puedes transmitir algo que
exteriorizas y en ese momento no posees?, ¿Cómo puedes transmitir amor,
comprensión, y todos los atributos de Cristo si no permites que él se exprese?,
¿Cómo puedes transmitir Koinonia si aún no comprendes que Koinonia es el mismo
Cristo en nosotros?.
III)
ENTENDER
QUE SI NUESTRO CUERPO REALMENTE SE DIRIGE EN KOINONIA, SE COMPRENDE QUE NUESTRO
CUERPO ESTA SANO Y NO HAY NINGUNA CELULA MUERTA EN EL. (2 CO 6.14: «COMUNIÓN».
A. 2
Co 6:14 No os unáis en yugo desigual con los
incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y
qué comunión la luz con las tinieblas? La sabiduría de Dios. Debemos
siempre buscar la forma de transmitir el sanador de vida a través de nosotros
para sanar todas las partes del cuerpo. Pero si esa parte del cuerpo no permite
recibir sanación no debe obstruir el correcto funcionamiento del cuerpo. Cristo
mismo se encargara como cabeza tomar la decisión de procesar y tratar esa parte
del cuerpo afectada.
B. De
la participación en el conocimiento del Hijo de Dios (1 Co 1.9: «comunión», RV:
«participación»); 1:7 de tal manera que
nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuesto Señor
Jesucristo; 1:8 el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis
irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. 1:9 Fiel es Dios, por el
cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor. 1:10
Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que
habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que
estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.
C. La
participación en lo que se deriva del Espíritu Santo siempre debe fluir en
todos nosotros y en nuestro conducir. (2 Co 13:14: «comunión», 13:14 La gracia del Señor Jesucristo, el
amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén.
D. Transmitir
a Cristo es portar su vida gloriosa en y a través de nosotros, RV:
«participación»; Flp 2.1: «comunión»); 2:1
Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si
alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna
misericordia, 2:2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo
amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. 2:3 Nada hagáis por contienda o por
vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como
superiores a él mismo; 2:4 no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada
cual también por lo de los otros. 2:5 Haya, pues, en vosotros este sentir que
hubo también en Cristo Jesús, 2:6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó
el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 2:7 sino que se despojó a sí mismo,
tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 2:8 y estando en la
condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la
muerte, y muerte de cruz. 2:9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo,
y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 2:10 para que en el nombre de
Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y
debajo de la tierra; 2:11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor,
para gloria de Dios Padre.
IV)
COMPAÑERISMO,
COMUNIÓN. DENOTA: (A) LA PARTE QUE UNO TIENE EN CUALQUIER COSA, PARTICIPACIÓN,
UN COMPAÑERISMO RECONOCIDO Y GOZADO; ASÍ, SE USA DE LAS EXPERIENCIAS E
INTERESES COMUNES DE LOS CRISTIANOS (HCH 2.42: «COMUNIÓN»; GL 2.9: «EN SEÑAL DE
COMPAÑERISMO», RV: «DE COMPAÑÍA»);
A.
Fruto de la koinonia de Dios expresada a nosotros. (Hechos
2:42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos
con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Sabiduría que rebasa
cualquier otra.
B. Reconociendo
nuestros errores internos y sanándolos en Cristo para participar en verdadera
koinonia en otros. (Gálatas 2:9) y
reconociendo la gracia que me había sido dada, Jacobo, Cefas y Juan, que eran
considerados como columnas, nos dieron a mí y a Bernabé la diestra en señal de
compañerismo, para que nosotros fuésemos a los gentiles, y ellos a la
circuncisión.
C. Hallando
expresión en el servicio conjunto a los necesitados en koinonia (Ro 15.26:
«ofrenda», 15:26 Porque Macedonia y Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los
pobres que hay entre los santos que están en Jerusalén. RV: «colecta»;
lit., «hacer cierta comunión»;
D. 2
Co 8.4: «participar» Contribuir para lo obra del Señor es un honor, un
privilegio y total regocijo, por lo que expresarla en un nivel en el que
humanamente pensemos que es casi imposible, en Cristo todo es posible. Él nos
conforma a la medida del varón perfecto para que exterioricemos esa koinonia 8:1 Asimismo, hermanos, os hacemos saber la
gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; 8:2 que en grande
prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron
en riquezas de su generosidad. 8:3 Pues doy testimonio de que con agrado han
dado conforme a sus fuerzas, y aún más allá de sus fuerzas, 8:4 pidiéndonos con
muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este
servicio para los santos. 8:5 Y no como lo esperábamos, sino que a sí mismos se
dieron primeramente al Señor, y luego a nosotros por la voluntad de Dios; RV:
«comunicación»;
E. Si
tenemos a Cristo que es nuestra ayuda mutua, podemos expresar esa ayuda mutua a
través de nosotros en todo. 13:16 Y de
hacer bien y de la ayuda mutua no os olvidéis; porque de tales sacrificios se
agrada Dios. 13:17 Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque
ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo
hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso.
F. El
coadyuvar en la extensión del reino de Dios
y su justicia mediante la aportación de dones AYUDAR, COMPAÑERISMO
MUTUO, OFRENDAR, PARTICIPAR, COMO SEÑAL DE CRISTO. (Flp 1.5: «comunión en el
evangelio»). 1:2 Gracia y paz a vosotros,
de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo. 1:3 Doy gracias a mi Dios siempre
que me acuerdo de vosotros, 1:4 siempre en todas mis oraciones rogando con gozo
por todos vosotros, 1:5 por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer
día hasta ahora; 1:6 estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros
la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;
G. Debemos
ser ministros competentes de un nuevo pacto con un alto nivel de desempeño (diga conmigo High Performance: significa
alta calidad, alto rendimiento, alto desempeño). Así como cada persona
busca siempre mejorar día a día en toda área de su vida, tal cual lo hace en su
área profesional, académica, sentimental, deportiva, entre otras. Así como
existen atletas de alto desempeño, que buscan cada día mas establecer nuevos
estándares, nuevos records, que buscan mejorar día tras día, superando cada
limitación que les impida superar todos los records. Estos se entrenan para
eso, entrenan su cuerpo y su mente. Así mismo nosotros debemos entrenan nuestro
espíritu y nuestra mente para que no
seamos nosotros los que nos dirijamos en imperfección sino en esa perfección en
Cristo. Que Él sea nuestro perfeccionador, que establezca todos los nuevos
records en nuestras vidas y las vidas de otros, que nos conforme como ministros
competentes de nuevo pacto de alto desempeño para toda buena obra y la perfecta
koinonia en todo ámbito que queramos que sea permeado a través de Él.
CONCLUSIÓN:
Comprender que la koinonia no es un
efecto meramente externo, sino que a su vez:
1. Koinonia
es expresar la unión común que tenemos en Cristo, para ser hitos colaboradores
con las demás partes de su cuerpo como iglesia.
2. Koinonia
es tener unión común, tanto en nosotros mismos como con los demás de forma
integral en todos los aspectos de nuestra vida cristiana. Es la imposibilidad
de conducirnos en tinieblas y en luz a la vez. Es deslastrarnos de una vida
paradójicamente muerta, la vida de Adán que moraba en nosotros y estaba en completa discordancia y carencia de
dirección de Dios.
3. La
koinonia no es más que la expresión del pléroma
(llenura) de la vida de Cristo graficado (como un graphos) en nosotros que se
manifiesta en un efecto (Kratos) para que seamos sunergos
(colaboradores), en el oikos
(casa, hogar cuerpo, iglesia) de Dios. Para conducirse en koinonia se debe
entender que Cristo que es la koinonia misma encarnada debe expresarse como
vida en nosotros, para la correcta contribución a la obra en su cuerpo que
somos como iglesia.